Briseida Loya Barrios
5e Lic. Comunicación

La última experiencia con un profesor y su utilización con las TI fue realmente aceptable. La mayoría de mis profesores, casi un 80% utilizan de alguna u otra manera estas herramientas. Y es muy complaciente ver el empeño que ponen para que nosotros también las usemos. Lo relevante de esto es que los problemas que puedan surgir no son específicamente tecnológicos sino en su mayoría de lenguaje.
Cada día al menos en mi caso, el horario de permanencia en clases era de 6am a 3pm, y se podría decir que de 5 clases diarias con diferentes maestros, en al menos 3 de ellas se utilizan estos componentes tecnológicos.
Es importante mencionar que cuando hablo de lenguaje me refiero a las diversas proyecciones que hacemos para las materias. En cada una de ellas, en su mayoría utilizamos diapositivas, acetatos, televisor, etc. Y es penoso que en ellas, cada vez sean más frecuentes los errores ortográficos, de sintaxis y redacción. Además de la ausencia de sentido de reducción de textos para facilitarnos la comprensión.
Si bien las herramientas tecnológicas nos brindan múltiples beneficios en la educación, al menos en nuestra institución, es necesario que nosotros como educandos aprovechemos las bondades de las TI, pero sin exagerar y tomando en cuenta que sólo es una herramienta que ayuda en los procesos educativos. Pero que si hablamos de contenidos tendremos que distinguir entre “contenidos buenos o malos”. Esto puede reducirse en encontrar la diferencia entre “éxito o fracaso” en la dinámica de la Educación.